La toxicidad natural

POR FRANCISCO GOMEZ

Fuente: Autismo en Vivo | 18/07/2022

Fotografía: Pixabay.com

Es corriente asumir cierta toxicidad como normal y aceptable, sin saber que te está dañando la salud hasta niveles difícilmente reversibles

Los Asperger solemos tener alta sensibilidad, y según como asumir las toxicidades como algo casi inevitable, por cuanto resulta difícil vivir en una burbuja de paz y buen rollo. Quien más quien menos tiene problemas personales, y ello se trasluce en su relación con los demás, creando cierta toxicidad en la relación.

Muchas de estas toxicidades se asumen como normales en la medida que convives con ellas de forma casi permanente, especialmente en el caso de la familia o pareja, con quienes sientes un vínculo de cierta dependencia y en cualquier caso más difícil de romper. Cuando sufres esta toxicidad desde pequeño incluso te cuesta darte cuenta de cómo te daña o puede dañarte tu salud mental. Cuando uno es joven aguanta más y es menos consciente de sus debilidades, en la medida que dichos problemas suelen pasar factura más a medio o largo plazo.

En la medida que uno sufre dichas toxicidades, la energía negativa también revierte en los demás, especialmente en los más débiles, los que menos se pueden defender. Ahí empieza el círculo vicioso de los malos rollos, muy difícil de romper a veces.

En mi caso, no pude romperlo más que temporalmente hasta los 26 años y aún allí empecé uno nuevo, pero definitivamente fue pasados los 30, cuando rompí relación con muchísima gente de mi entorno, si bien entonces la negatividad quedaba dentro. Con el tiempo, en la medida que todo ello te trae problemas, uno se da cuenta del daño que produce esta toxicidad, no sólo en los pensamientos y el estado de ánimo, sino en el subconsciente y también la salud física.

La solución pasa por desarrollar asertividad para evitar de tragarse la negatividad de los demás, la toma de conciencia acerca de cómo te afecta y el aprendizaje de técnicas de sanación y regulación del estado emocional. Todo un reto, que merece mucho la pena.