Sensibilizar el autismo

POR GABRIEL MARIA PÉREZ

Fuente: Univers Àgatha | 13/03/2024

Fotografía: Univers Àgatha

Va pasando el tiempo, por ejemplo, desde que empecé mis actividades de sensibilización por el autismo.

Durante este tiempo todo ha ido evolucionando, empezando por mi propia hija Àgatha, que va creciendo y recuperando día a día sus sonrisas, su hambre y una alegría que tanto deseábamos.

Esperemos que se mantenga.

Empecé mis actividades, como decía al principio, acercándome a algunos escritores, algunos de ellos con cierta sensibilidad, a los que les di altas dosis de credibilidad, pero que tras la dura experiencia en el primer Projecte Àgatha, se me declararon como los que tenían experiencia y, por lo tanto, yo tan solo era un personaje que les había transmitido una idea cultural para sensibilizar por el autismo y, automáticamente, tenía que ser dirigido por ellos para poder llevar a buen puerto esta iniciativa.

Digámoslo claro, yo era un mindundi: “A este hay que controlarlo”.

Así fue un año duro, convencido de realizar algo que podía ser importante, pero a la vez bloqueado en gran parte por algunos de mis compañeros, los auto-proclamados, entendidos con experiencia.

Y es cierto que se publicó una sensacional antología poética catalana, sí, sensacional. Y también es cierto que fue un gran trabajazo, sobe todo de parte de una de las curadoras.

Después vino la Associació Univers Àgatha, y a allí sí pude desarrollar mejor mi empeño en sensibilizar por el autismo, sin trabas internas, con la publicación de dos discos solidarios y otro libro también.

Muchos conciertos, recitales, etc., solidarios por el autismo, durante prácticamente ocho años, de los que me siento muy feliz, pese a las dificultades.

Eso sí, también hubo los indeseables que intentaron minar el simple acto de querer sensibilizar con cultura por el autismo. Llegamos a recibir cartas certificadas considerándonos una asociación capitalista (aún me río como cuando la recibí), seguro que motivado por no regalarles ninguno de los productos que publicamos o no hacerles participar en las presentaciones.

Esta era su solidaridad.

Ahora, ya separado del Projecte... y de Univers Àgatha, pues esta última tuvo que cerrar, un poco por el tema de la pandemia de covid19, pero también por cansancio acumulado, continúo pensando que han sido dos experiencias muy gratificantes para mí y espero que para otras muchas personas más.

Mientras pueda, continuaré sensibilizando a mi manera por el autismo, y si sigue acercándose a mí falsa gente para dárselas de solidarios, que vengan, mientras sirva para concienciar sobre este trastorno estaré feliz, ya sabemos que hay mucho virus pernicioso que con un buen desinfectante desaparece.