Hoy es luna llena y desde el balcón de casa se asoma dándonos la bienvenida a la noche e invitándonos a un paseo por su magia, por sus miste

Es complicado, muchas veces, cuando te sientes inmerso en la necesidad de dar a conocer un trastorno, un síndrome, en mi caso el autismo, qu

Sé que me reitero en muchos de mis artículos, pienso que es irremediable.

Me parece mentira, ya pasó el mes de agosto, ya pasaron las vacaciones, ya pasó la fiebre por salir huyendo de las rutinas y… muchos… ya hac

El 30 de septiembre en Badalona, la nueva asociación ViuTea organiza un taller impartido por Anabel Cornago de 8 horas de forma presencial.

Todos los que aparcaban junto a los campos de atletismo conocían la plaza de Jake, excepto yo. Mis retos en torno a la conciencia de los dem

Es sábado por la tarde, hora de la sagrada siesta.

Tengo una hija con autismo severo diagnosticado con un 88% de (dis)capacidad, lo que vendría a ser prácticamente un 100%, pero como tiene al

Me sorprende mi hija, probablemente se deba a los misterios intrínsecos a su autismo severo diagnosticado con una alta discapacidad.

A veces uno necesita reivindicarse o publicitarse, y si puede hacerlo en una web como esta, mejor que mejor, lo agradezco inmensamente.

Ignacio nos explica el por qué de su situación actual respecto a la página web autismovivo.org

El 2 de abril es el Día Internacional del Autismo y, aunque cada día es un día internacional de algo importante, yo llevo ya unos años celeb

Nos acercamos estos días a uno de los momentos más hermosos del año, el comienzo de la primavera.

Sara Codina nos cuenta cómo es la vida con TEA y cómo fueron todos esos años sin saber qué era lo que realmente le ocurría

Me levanté nada más se encendieron las luces.

Como ya sabéis tengo una hija con autismo severo llamada Àgatha, un tesoro azul que polariza nuestra lucha diaria, con sus alegrías, sudores

Como otaku, soy seguidor de muchas series de manga y anime, ya he comentado mi afición por ejemplo por Dragon Ball o One Piece.

Murió David Crosby, el mismo día que mi padre, pero quince años después.

Tenía once años la primera vez que comencé a leer “El misterio del solitario” de Jostein Gaarder, el autor noruego, y desde entonces, por mu

Han pasado ya las fiestas navideñas y una vez cambiado de calendario o de año, si se prefiere así, y una vez, también, desaparecidos los ado