Mi chica ha vuelto

POR GABRIEL MARIA PÉREZ

Fuente: Univers Àgatha | 28/01/2024

Fotografóa: Pixabay

Han vuelto las risas, los saltos de alegría, y algo muy importante, ha vuelto a comer y a beber sin dificultades, así como a hacer sus necesidades físicas con normal regularidad, dentro de su condición de persona con autismo con alto grado de (dis) capacidad.

Sí, mi chica ha vuelto.

Ha sido un largo tiempo, quizás incluso de algunos años, las dudas, la inquietud, la preocupación acrecentada por el qué le estará pasando, etc, pero la lucha del día a día, como así ha sido durante estos veintitrés últimos años, con una angustiada madre azul envidiable, aguantando con paciencia las sombras de su, también angustiado marido azul.

Habrá los negacionistas de medicaciones, de vacunas, de... bueno, ya sabemos, negacionistas de lo que sea con tal de tocar las pelotas, pero los antibióticos, en nuestro caso, podríamos decir que nos han devuelto a mi hija.

No sabéis cómo cambian las tinieblas en casa cuando de pronto aparece ella con esa sonrisa amplia y unos grititos o pequeñas risotadas que iluminan alrededor.

No sabéis cómo alivia este regreso de cara a la cotidionidad del día a día.

No, este artículo no es para reivindicar, solo para transmitir que una potentísima lustrosa luz ha vuelto, de momento, de nuevo a casa.