Miguel Gallardo (ilustrador)

POR GABRIEL MARIA PÉREZ

Fuente: Univers Àgatha | 27/02/2022

Fotografía: Univers Àgatha

Miguel Gallardo es un reconocido ilustrador vinculado al mundo del autismo

Poco antes de iniciar el primer Projecte Àgatha, de sensibilización por el autismo con cultura, tras una larga conversación telefónica con el escritor ilicitano Antonio Francisco Buitrago, sobre la idea de realizar un libro con recopilación de textos nuestros, contando con otros más de gente mediática, me decidí a intentar contactar con Miguel Gallardo, ya que fue uno de mis iconos en mis años de juventud loca, de quien siempre admiré toda clase de personajes que había creado, Makoki, Buitre Buitaker, Perico Carambola, así como la revista underground “El Víbora” de la que fue parte fundacional (aún tengo alguna en casa).

https://es.wikipedia.org/wiki/El_V%C3%ADbora

https://es.wikipedia.org/wiki/Makoki_(historieta)

Pero si contacté con él fue, aparte de la admiración por lo que acabo de mencionar, también porque sabía que tenía una hija con autismo y había visto la excelente película “María y yo”, que trata de manera soberbia sobre el autismo de su hija María, sus viajes a Canarias, la convivencia con ella, de una manera didáctica, divertida, tierna y emocionante.

El libro:

https://www.astiberri.com/products/maria-y-yo

La película/documental:

https://www.rtve.es/play/videos/el-documental/documental-maria-yo/2060907/

El primer intento de contactar con él, vía privado de Facebook, fue un fracaso...

A pesar de este fracaso, unos días más tarde volví a intentarlo, y me contestó casi al instante a otro privado de Facebook, le hice mención de lo que pretendía proyectar y me dijo,

-Oye, te paso mi teléfono y llámame, que estaremos más cómodos-

Fueron más de treinta minutos hablando sobre el autismo, sobre el proyecto, sobre María y mi hija Àgatha.

De ahí nació una especie de amistad/colaboración altruista inimaginable por mí años atrás.

Desde la portada del libro solidario “Autisme: trenquem el silenci amb la poesia” (Autismo: rompamos el silencio con la poesía) Viena Ed. , pasando por el logo de la recién extinta asociación Univers Agatha Autisme, otra portada para el libro “Lletres blaves per l'autisme - Letras azules por el autismo”, algún que otro cartel para eventos solidarios de autismo, incluso alguna charla/diálogo hablando él de su hija María y yo de mi Àgatha, hasta participar en el evento solidario del 6 de junio del 2018 en la Sala Luz de Gas, de Elliott Murphy y Olivier Durand, dando una pequeña charla sobre autismo y su hija, antes del inicio del concierto.

Tuve el placer de ir a su casa algunas veces, en la última de ellas conocí a María y fue un verdadero placer, anécdota siguiente incluida.

Recuerdo que en un momento dado, él se levantó, me dijo -Ahora vengo, vigila con María-, y se ausentó unos minutos.

No entendí qué quería decir con eso de que vigilara “con” María, hasta que ella se me acercó, mirada y sonrisa maliciosas, y me dio un fuerte pellizco en el brazo al que no pude evitar responder con un ¡¡¡Aaaaaayyyy!!!, momento en el que regresó Miguel sonriente para recordarme, -Ya te dije que vigilaras con María-, y pedirle muy suavemente a ella que no lo volviera a hacer.

Miguel tenía su excentricidad, como todo personaje mediático, pero a la vez tenía un gran grado se sencillez y mucha humanidad.

Esas personas de las que me gusta decir que tienen un corazón enorme.

Gracias al libro y película “María y yo”, publicado en varios países, viajó y realizó múltiples conferencias sobre autismo, siendo una de las personas que más ha dado a conocer el autismo desde su vertiente de familiar directo, aprovechando sus altísimas cualidades como ilustrador.

También ha colaborado de modo altruista con varias entidades de autismo y participado en varios eventos solidarios sobre este trastorno.

Con un humor propio exquisito, plasmado sobre todo en su obra gráfica, su pérdida representa la desaparición de un referente tanto en el mundo de la ilustración, como en el de la sensibilización por el autismo.

Recuerdo cuando hace casi dos años vi en Facebook que hacía referencia a su enfermedad, me asusté y decidí llamarle.

Se puso enseguida, otras veces costaba más que se pusiera, ya que era alguien ultra-ocupado, y me explicó que le habían descubierto un tumor (boniato le llamaba), en la cabeza, cuando empezó a perder el equilibrio y fue a hacerse unas pruebas, con este duro diagnóstico.

No dejó de luchar y enfrentarse a todo con su característica visión de lo que le rodeaba, ese humor especial y genuino, marca Gallardo.

Haciendo referencia a su enfermedad publicó el libro “Algo extraño me pasó de camino a casa”.

https://www.astiberri.com/products/algo-extrano-me-paso-camino-de-casa

En marzo del año pasado me dijo que había recaído y que iban a operarle de nuevo.

Pero en mayo publicó una viñeta en las redes sociales dando el notición de que su neurocirujano le había llamado para decirle que estaba limpio del todo.

Aunque el maldito cáncer regresó.

Hace tres meses y poco le envié un whatsapp ignorando que había empeorado más, para pedirle si me escribiría un par de frases para la contraportada de mi próximo libro, a punto de publicarse, me confirmó que estaba en tratamiento y me pidió que le volviera a preguntar en unos días.

Su último mensaje de final de noviembre me decía que ahí seguía...

Ahora sigue en nuestras mentes, en nuestro corazón, en su linda hija María, en su mujer, en sus amigos íntimos, en su enorme obra gráfica, sus charlas, su humanidad, etc., etc.

¡GRACIAS MIGUEL Y HASTA SIEMPRE!

¡Hasta pronto, Miguel!